QUINTA PELICULA: BLADE RUNNER.

Año: 1982
Dirección: Ridley Scott
Guión: Davir Webb Peoples & Hampton Fancher
Producción: Philip K. Dick



Blade Runner es una película de ciencia ficción estadounidense,, dirigida por Ridley Scott, estrenada en 1982 y basada, lejanamente, en la novela de Philip K. Dick ¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas? (1968). Se ha convertido en un clásico de la ciencia ficción y precursora del género cyberpunk. Obtuvo dos nominaciones a los Óscar.

La película transcurre en una versión distópica de la ciudad de Los Ángeles, EE.UU., durante el mes de noviembre de 2019. El guión, escrito por Hampton Fancher y David Peoples, se inspira libremente en la novela¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas? de Philip K. Dick. La película describe un futuro en el que seres fabricados a través de la ingeniería genética, a los que se denomina replicantes, son empleados en trabajos peligrosos y como esclavos en las «colonias exteriores» de la Tierra. Estos replicantes, fabricados por Tyrell Corporation para ser «más humanos que los humanos» -especialmente los modelos Nexus-6- se asemejan físicamente a los humanos (aunque tienen una mayor agilidad y fuerza física) pero carecen de la misma respuesta emocional y de empatía. Los replicantes fueron declarados ilegales en el planeta Tierra tras un sangriento motín. Un cuerpo especial de la policía (los blade runners) se encarga de rastrear y matar (o "retirar" en términos de la propia película) a los replicantes fugitivos que se encuentran en la Tierra. Con un grupo de replicantes particularmente brutal y hábil suelto en Los Ángeles, un dubitativo Deckard es invocado desde su semi-retiro para que use algo de "la vieja magia blade runner".

Analizando los elementos sobre inteligencia artificial vistos en esta película, podríamos decir que entre ellos solamente el control de navegación se podría clasificar como algo que a dia de hoy se puede resolver.

No es posible resolver en la actualidad elementos que aparecen en la película tales como los detectores de mentira cde tan alto nivel, coches voladores, pistolas láser y sobre todo los androides que aparecen, que son impensables aún

Tras el visionado de la película Inteligencia Artificial podemos decir que algunas de las tecnologías que se muestran en la misma no son cotidianas hoy en día. Entre esas listas de tecnologías podemos destacar entre otras los paraguas que podemos visualizar en la película, ya que hoy día en nuestra sociedad no estamos tan avanzados para su creación, aunque ya hay algunas personas que se están dedicando a producir estos paraguas.

Otra tecnología que no está en nuestra sociedad, son las pistolas que se utilizan, así como el detector de mentiras, donde se supone que se detectan, este aparato en algunos países del mundo tienen validez pero en otros como España no tienen validez por ejemplo frente a un juez.


Otra tecnología podría ser los robot, los cuales presentan grandes semejanzas con el ser humano, además podemos decir que en cierta medida saben lo que está bien y lo que está mal, como cuando uno de ellos decide salvar al detective.


En esta película también podemos ver como se puede diferenciar a un robot de un humano, así como que es real y que no lo es. Resulta paradójico que un detective en este caso Deckard se enamore de un robot cuando ha estado podemos decir que “luchando” contra ellos.



En conclusiones podemos decir que esta película muestra muchos avances tecnológicos que actualmente en la sociedad en la que vivimos estamos muy atrasados.

Uno de los principales anacronismos, uno de los principales detalles que no convencen del todo, es el hecho de que los replicantes, tan desarrollados y perfectos, no tengan ningún tipo de distintivo. Cuesta creer que quienes los crearon no hayan hecho algo para distinguirlos, teniendo en cuenta que los crearon contando con que podían dar problemas.

A parte de esto, no hay mucho más: las calles son decadentes, al igual que la población, pero esto no tiene por qué ser un anacronismo, sino una visión más sobre el posible futuro que nos espera. Es destacable la cantidad de población oriental que vemos, pero en ningún caso tiene por qué ser un error, sino todo lo contrario.

Al igual que la mayoría de películas que hemos visto y de la gran mayoría de películas sobre inteligencia artificial, en Blade Runner se nos muestra una sociedad deshumanizada, solitaria, en la que el individuo se encuentra aislado física y emocionalmente.

La inteligencia artificial presente en el filme ha conseguido asimilarse e incluso superar a los seres humano en muchos aspectos de la vida. Son conscientes de su existencia, de su pertenencia a un grupo determinado; tienen sueños, anhelos, y más experiencias que nosotros. Su problema es que conocen cuando va a llegar su fin, quieren evitarlo, poder ser completamente humanos, y cuando no pueden evitar su muerte perdonan otra vida, dan la oportunidad a otro ser de seguir viviendo.



Sin embargo, en esta sociedad en que las barreras entre el ser humano y el ser artificial están difusas, y es necesario el uso de tecnología para poder diferenciar a las dos razas; el mayor dilema ético es la razón por la cual se crean esclavos inteligentes con fecha de caducidad pero aun así se fabrican con apariencia humana. Se podría pensar que es una crueldad, hacer sufrir a ellos y a nosotros, pero la solución se encuentra en la atractiva idea de jugar a ser dioses. Esto es algo que siempre ha estado ligado a los sueños de grandeza de la humanidad, y llegado el momento en que podamos crear seres tan parecidos a nosotros por qué no hacerlos similares a los humanos, como una mujer que da a luz a su hijo. Otorgamos cinco años de experiencias que se acaban en un instante.